... (José Redondo Rodríguez, 1818-1851). Cúchares divertía con su estilo variado y saleroso, mientras El Chiclanero era una lidiador más sobrio y eficaz, más puro en la interpretación de las suertes ...
... niña de los ojos grandes.MAJO(Sentándose.) ¡Qué se ha de encelar de ti, pendón PRECIOSILLAVaya, saleroso, no se cargue usted de estera, convídeme a alguna cosita.MAJOTío Paco, déle usted un vaso ...
... imprimen semejanza de hijos del abismo. Childe Harold quiso una vez mostrarse picotero, saleroso, y quedó mal. Este bello Lucifer infunde admiración cuando se tira de rodillas en presencia del Parnaso ...
... que iba absolutamente trastornada. En su vida había visto ella un corte de cara más bonito y saleroso. Era como un sueño, como la ilusión de toda la vida realizada de repente por milagro de Dios ...
... suponer. En aquella cabecita graciosa se reflejaban pensamientos de cierta especie, y en aquel cuerpo saleroso, latidos... ¡y vaya usted a saber Pero, señor, ¿en dónde había tenido el ojo bueno ...
... a las cobras:—Vuelve por favor mi vida vuelve a la ventana para que yo vea desde aquí tu cuerpo saleroso no ves que me muero por verte y no vienes y ahí está la ventana vacía y estoy triste ...
... niña de los ojos grandes.MAJO(Sentándose.) ¡Qué se ha de encelar de ti, pendón PRECIOSILLAVaya, saleroso, no se cargue usted de estera, convídeme a alguna cosita.MAJOTío Paco, déle usted un vaso ...
... suponer. En aquella cabecita graciosa se reflejaban pensamientos de cierta especie, y en aquel cuerpo saleroso, latidos... ¡y vaya usted a saber Pero, señor, ¿en dónde había tenido el ojo bueno ...
... que iba absolutamente trastornada. En su vida había visto ella un corte de cara más bonito y saleroso. Era como un sueño, como la ilusión de toda la vida realizada de repente por milagro de Dios ...
... imprimen semejanza de hijos del abismo. Childe Harold quiso una vez mostrarse picotero, saleroso, y quedó mal. Este bello Lucifer infunde admiración cuando se tira de rodillas en presencia del Parnaso ...
... niña de los ojos grandes.MAJO(Sentándose.) ¡Qué se ha de encelar de ti, pendón PRECIOSILLAVaya, saleroso, no se cargue usted de estera, convídeme a alguna cosita.MAJOTío Paco, déle usted un vaso ...
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