... monstruo entre los hombres. Era demasiado buen maestro como para no saber que el zopenco no siempre es un zopenco. Se divirtió al enterarse de que este
... ;s le ha ense& 241;ado a Vd. ese se& 241;or D. Paco, a quien desde el primer momento tuve y diput& 233; por un gran zopenco? -Tambi& 233;n me ha ense& 241;ado historia, s& 237; se& 241;or. Y s& 233 ...
... se extienden desde el mar salado a los confines del desierto de Damasco, será siempre un zopenco de sangre gorda, y su ingenio no se avivará nunca más que ante el incentivo grosero de la ganancia ...
... Ofrecía su mano con verdadera intención y creencia firme de hacer un bien. ¡Si el pobre no alcanzaba más; si era un zopenco; si ignoraba con quién hablaba... Isidora buscó rápidamente las frases ...
... sido llamada por los grandes, por los embajadores, ¡por la corte entera ¿Sabes tú, rústico, ganso, zopenco, el dineral que se daba sólo por oírme?-Si esos mismos -dijo el barbero- te vieran ahora ...
... testigos; y no tenemos sino dos: el ciego y su lazarillo o su perro. -¡Aquí no hacemos testamento macho ni hembra, zopenco, zopencón , dijo don Quijote. Para la friolera en que nos hemos concertado ...
... Tomás era tan tranquilo que los académicos, en las escuelas a las que asistió regularmente, pensaron que era un zopenco. Ciertamente fue la clase de alumno, nada desconocido, que prefiere ser tomado ...
... poner entre unos y otros, y qué lástima me da verle la cara con tanto cuajarón ... Tú, gran zopenco, cuando te hagan ministro, avisa... Échale otro piso al sombrero para que desde allí te veamos ...
... y con conciencia sería egoísta y rastrero, incluso aunque seles persuadiera de que el tonto, el zopenco o el sinvergüenza está más satisfechocon su suerte que ellos con la suya» (Mill, 1991: 139 ...
... poner entre unos y otros, y qué lástima me da verle la cara con tanto cuajarón ... Tú, gran zopenco, cuando te hagan ministro, avisa... Échale otro piso al sombrero para que desde allí te veamos ...
... ;s le ha ense& 241;ado a Vd. ese se& 241;or D. Paco, a quien desde el primer momento tuve y diput& 233; por un gran zopenco? -Tambi& 233;n me ha ense& 241;ado historia, s& 237; se& 241;or. Y s& 233 ...
... el día que tú partiste lloraba como una fuente, y no veíamos modo de consolarla... Pero tú, gran zopenco, ¿no sabías que vivimos aquí hace cinco años, por desinio del Señor? ¿Cómo no has ido ...
... la mano, que San Cayetano me baila delante.-& 191;San Cayetano? -& 191;No lo ves, zopenco? Aquel convento grande que est& 225; a la derecha. Tambi& 233;n lo estamos fortificando.-Esto es muy bonito ...
... se burlaba estúpidamente de su mujer, que, sin poseer dotes excepcionales era junto a tal zopenco un prodigio de la naturaleza. Candelaria se cobraba de aquel menosprecio injusto proclamando ...
... llevado adelante? & 191;Por qu& 233; despu& 233;s de esta victoria desandamos lo andado? -& 161;Zopenco -me contest& 243;-. Esto no ha sido m& 225;s que una fiestecilla de p& 243;lvora, y todav& 237 ...
... un puñado de siemprevivas en el sombrero, al lado de Paula, que relinchaba de contenta. Pero el muy zopenco, en lugar de agarrarse a tan sencillo y placentero goce, que estaba a dos deditos de su mano ...
... la mano, que San Cayetano me baila delante.-& 191;San Cayetano? -& 191;No lo ves, zopenco? Aquel convento grande que est& 225; a la derecha. Tambi& 233;n lo estamos fortificando.-Esto es muy bonito ...
... un puñado de siemprevivas en el sombrero, al lado de Paula, que relinchaba de contenta. Pero el muy zopenco, en lugar de agarrarse a tan sencillo y placentero goce, que estaba a dos deditos de su mano ...
4.551 palabras
Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar |
Más información