VIII. La Reforma

Los 28 puntos de la confesión de Augsburgo

En la historia de la Reforma la «Confesión de Augsburgo» es un hito. Los príncipes y los teólogos reformados presentan a la Iglesia de Roma y al emperador Carlos una confesión de fe de 28 puntos. Lutero y sus hombres se sienten poseedores de una nueva conciencia cristiana. La Confessio Augustana es la base doctrinal de la Reforma y punto de partida para la marcha y funcionamiento independientes de las nuevas comunidades que surgen. A ella y a la constante inspiración de Lutero — cartas, visitas, instrucciones— se atendrán hasta la paz de Augsburgo (1555) en que se consumará definitivamente la escisión religiosa de Alemania.

Lo primero que hemos de observar es que la Confessio Augustana no se presenta como la doctrina o fe de los teólogos, sino de los príncipes alemanes. He aquí sus firmas: «Juan, duque de Sajonia, elector. Jorge, marqués de Brandeburgo. Ernesto de Lünebrug. Felipe, Landgrave de Hessen, etc. Juan Federico, duque de Sajonia… El senado y los magistrados de Nuremberg. El senado de Reutlingen.»

Sabemos que la redacción de la Confessio fue encomendada a Melanchton. Era el humanista, el intelectual y el conciliador, sabedor de los matices y alcance de los conceptos y de los términos. Para sacar adelante el documento tuvo que limar, cortar y precisar… y ceder mucho. Lutero, que no estuvo en la dieta, dirá: «Por mi parte, creo que se ha cedido mucho.» «Satán vive aún —escribe a Melancthon—, y bien se da cuenta del andar solapado de vuestra Apología que disimula los artículos del purgatorio, del culto de los santos, y, sobre todo, del papa anticristo…»

No satisfecho con las conversaciones mantenidas entre teólogos católicos y reformados en que se estudiaron uno por uno los puntos de la Confessio, dice Lutero: «No es posible en modo alguno conciliar a Belial con Cristo, y no debemos concebir esperanza alguna de concordia en cuanto a la doctrina. Por mi parte no cederé lo que se dice un pelo.» «Os absuelvo de esta dieta, en nombre de Dios, a todos vosotros…» —dirá a todo el equipo de teólogos—. «Volved a casa… No esperéis concordia o tolerancia, ni yo se la pedí jamás a Dios, sabiendo que es imposible…»

¿Qué es la Confessio Augustana? En su parte material es un documento dividido en 28 artículos, distribuidos en dos partes. La primera consta de 21 artículos, relativos al dogma. La segunda, de siete, «sobre los abusos eclesiásticos corregidos por la Reforma». Si hemos seguido atentamente la evolución religiosa de Lutero, podremos encontrar aquí un pensamiento en unas fórmulas ya definitivas. El artículo 4 nos habla de la justificación por la fe. El 5 nos dice que la Iglesia es la congregación de los santos o creyentes, en la que se enseña puramente el Evangelio y se administran los sacramentos…» Muchos de los puntos son admitidos por los mismos teólogos católicos… otros coregidos, interpretados… Y, finalmente otros rechazados.

Los siete artículos de la segunda parte se refieren a la Reforma emprendida por Lutero y sus hombres: comunión bajo las dos especies, matrimonio de los sacerdotes, la misa, la confesión, la discriminación de alimentos, los votos monásticos, jurisdicción de los obispos, etc.

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información