... a: Actes del 3r. Congrés de Filosofia al País Valencià), págs. 13-18.• Lourdes VALDIVIA DOUNCE. “Lo indecible en Frege”. En Análisis Filosófico, ISSN 0326-1301, ISSN-e 1851-9636, Vol. 4, N ...
... , Sancho, serán luengos tus días, tu fama será eterna, tus premios colmados, tu felicidad indecible, casarás tus hijos como quisieres, títulos tendrán ellos y tus nietos, vivirás en paz y beneplácito ...
... de Benito Pérez Galdós y Santiago Ramón y Cajal. En esta labor de saneamiento, es indecible la deuda que se tiene para con Macho y para con su sentido de responsabilidad de las formas, de rotundidad ...
... originalidad; otro, el monasterio del Buen Jesús (Bom Jesus), con sus gigantescas escalinatas, de indecible grandeza. Ambos edificios, del s. XVII, y de autores anónimos, revelan una opulencia ...
... , 1a línea y el color tienen las gracias del lirio, y la composición de una ingenuidad infantil, pero de indecible belleza?». El retablo fue pintado para Santo Domingo de Fiésole, y allí lo vio ...
... de los rostros de sus Vírgenes y santas. Ello aparte, la pintura de Josefa de Óbidos es de indecible encanto, un tanto ingenuo, y de una delicadeza extremada. Cada día más valorada por la crítica ...
... . Sin duda Dios había decidido que su humilde sierva, Leandra Quijada, se consumiese en el indecible tormento de no ver ni gustar los aires y la luz de la tierra natal. Cumpliérase la voluntad de Dios ...
... con el desgaire que imponen la premura del tiempo y la nerviosidad del observador, me encantan a mí lo indecible, porque en ellas veo como el primer aliento de la Historia, libre aún de artificios ...
... . Visor, 1989. ISBN 84-7774-514-5.• José LORITE MENA. El Parménides de Platón: un diálogo de lo indecible. : Editum, 2012. ISBN 978-84-8371-582-6.• José SOLANA DUESO. Parménides: el canto ...
... Madrid: Síntesis, 2006. ISBN 84-9756-337-9.• Andoni ALONSO PUELLES. El arte de lo indecible: Wittgenstein y las vanguardias. Universidad de Extremadura, 2002. ISBN 84-7723-508-2.• Carmen ROCAMORA ...
... paso descendente de la mula, como tanteo de peldaños de desigual altura, me molestaba lo indecible, desguazándome todo el esqueleto... Vadeamos multitud de arroyos que bajaban turbulentos, batiendo ...
... , comenzando a desembarcar hombres que emprendieron su marcha hacia la ciudad. La sorpresa fue indecible y aunque se trató de establecer la defensa, era ya demasiado tarde. Aterrorizado, el presidente ...
... Océano para sacar la perla escondida en el seno más hondo de las aguas». Tragándome la píldora de indecible amargura que en mi boca puso la Madre excelsa, alabé su elevado conocimiento de las cosas ...
... ; gran cosa. El d& 237;a 16, despu& 233;s de haber pasado un gran miedo, gozamos lo indecible cuando les vimos llegar de la barca de Meng& 237;bar, derrotados y con su general muerto. & 161;C& 243;mo ...
... que el ya recorrido. Durante la travesía no me veréis. Pero allá nos encontraremos». Esto me alegró lo indecible. La dulzura risueña con que me habló la Madre, me hizo vislumbrar que del mundo ...
... en el pontificado, el dinámico san Dámaso I (366-384), trabajó lo indecible por atraerse a los todavía recalcitrantes orientales y para restablecer de una vez la concordia entre las dos iglesias ...
... artístico, sobresale el santuario del Bom Jesus (Buen Jesús), con sus gigantescas escalinatas de indecible grandeza. Este edificio-complejo, del s. XVII, y de autor anónimo, revela una opulencia ...
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